Dirección al Sahúco y al llegar a la Loma del Pardalejo nos desviamos por un camino a la izquierda a cuyo término nos sorprende un paisaje espectacular, El Roble coronado por su peña. Se trata de una pequeña aldea de cinco habitantes situada junto a una rambla en al paraje conocido como el Cerro del Gallo y que, entre otros atractivos, cuenta con el nacimiento de agua más generoso de todo el municipio, la fuente del Roble. Digna de mención es la carrasca centenaria cuyo tronco ronda los cinco metros de circunferencia.
La peña del Roble se eleva abrupta sobre la aldea y en ella se encuentra la popular cueva sobre la que circulan gran cantidad de historias entre la fantasía y la realidad.